Los fracasos y errores nos forjan y nos hacen crecer, no cabe duda. Sin embargo, a veces cuando fallamos nos obsesionamos mucho con nuestro error y nos olvidamos de los aciertos y éxitos que hemos logrado. Esta perspectiva del vaso medio vacío, Nos causa infelicidad, frustración y también una baja en nuestro rendimiento.
Me encantó lo que dice Tal Ben-Shahar al respecto:
"Aprender de lo que ha salido bien es tan importante como hacerlo de lo que ha salido mal; los fracasos pasados nos ayudan a descubrir lo que no tenemos que hacer y los éxitos pasados, a descubrir lo que podemos y tenemos que hacer".

A diferencia de obsesionarnos con nuestros errores, cuando pensamos en nuestros aciertos, nuestros logros del pasado, nos sentimos más inspirados y, por lo tanto, emocionalmente más preparados para asumir nuevos retos. y tener un rendimiento superior.
En lo personal creo que me voy a enfocar en recordar mis aciertos del pasado, y tú? Gerardo Crail Ch.
Director General en GC Retail Consultores.
Capacitación en Retail para los mejores proveedores del Retail en México.
Commentaires